24 enero 2010

LAS ACERAS DE MADRID SON PELIGROSAS


Sí, las aceras de Madrid son peligrosas y pueden ser mortales si están regadas ó mojadas por la lluvia. Tengo un ejemplo.Voy a describir la escena.






 Es una mañana lluviosa. En una céntrica calle me cruzo con una mujer que camina despacio con una cámara de fotos en la mano observando los edificos de la zona. En un instante, el ruido metálico de un golpe me hace girar la cabeza. La mujer con la que me acabado de cruzar está tendida en el suelo de espaldas. A la altura de la cabeza, el suelo está manchándose de rojo. Algunas personas  se acercan con gesto de asombro, curiosidad,  espanto. Alguien comenta :"!Está desangrándose, hay que llamar al SAMUR!". La mujer está aturdida pero no ha perdido el conocimiento. Una voz sugiere llevarla a un ambulatorio cercano, a escasos metros. Es más rápido que esperar al servicio de urgencia, dice.

Todos los curiosos creen que la sangre está fluyendo demasiado rápido, que se está desangrando. La mujer mira dónde ha caído. Sobre una de las placas instaladas en las aceras. La herida se la han provocado varios salientes, varios tornillos; no se sabe. Pregunta dónde está el centro de salud y sale corriendo. Todos los que la hemos rodeado quedamos perplejos ante su actitud. Le hemos pedido que espere sentada, pero su ropa sigue cubriéndose de sangre y está asustada. Gira la esquina y desaparece.
El grupo de curiosos no está sorprendido. Demasidos resbalones, demasiados patinazos. Demasiadas placas metálicas sobre las aceras. En cada placa, el distintivo de una compañía, de un servicio municipal. Colocadas sin órden ni concierto. Armas peligrosas. No, esta mujer no calzaba tacón. Eran botas planas. Una transeúnte a quien los edificios de principio del siglo XX le habían sugerido una foto de la arquitectura madrileña. Paseaba. Sin prisas. De su paseo, una brecha como recuerdo de un día de lluvia.


La cabeza de la herida por el resbalón sobre la placa metálica