25 abril 2010

LAS PLAYAS DE LAS LANDAS: POSTALES DE LIBERTAD Y SENCILLEZ PLACENTERA


Con sol, nubes,  viento, lluvia...las playas de las Landas son la sencillez placentera. Son playas de libertad, largas de arena blanca, arropadas por dunas que siguen un curso que a los ojos sugieren el infinito e invita a caminar y caminar sin ver ninguna edificación, escondidas tras esos montículos de médano. Este espacio es un espacio libre, de estar y dejar estar; se hace y se deja hacer. Nada es prefabricado, todo fluye sin aspavientos, sin "militancias" morales o estéticas. Mujeres y hombres desnudos a quienes nadie mira por el espacio compartido con bañadores, biquinis ó top-less. A nadie le importa lo de nadie. Son usos y costumbres arraigados. No se publicitan comportamientos. Es la libertad en la simplicidad sólo condicionada por un mar complicado que dicta normas imprevistas y hay que rendirse a su pauta. Es un mar difícil,  oleaje a veces peligroso. La climatología es un poco más benévola aún siendo cambiante, del sol se pasa a la nube, de la nube a la lluvia, hay viento y aún así, nada se interrumpe para el perfil de quienes vienen y regresan a este lugar de bosques y dunas, donde el cemento no existe, nulos los chiringuitos de playa, no hay yates que tapen la visión, no se oyen motores de juguetes naúticos y veloces...

El viento atlántico propicia el vuelo de la cometa de la niña

Se escucha el sonido de las olas, se observa las gaviotas, se pesca, se surfea, se nada, se construyen castillo en la arena, se lee, se charla, se camina sobre la arena, se hace footing, se juega con los perros,  tacitamente aceptados...Deportes sencillo, veraneantes que buscan naturaleza, que se adaptan al entorno y que no quieren llevarse a cuesta el cemento, las bondades urbanitas, en un afán de manipular hasta lo que no conviene manipular...Por salud mental, también.

Con frio, viento y lluvia, el juego no se interrumpe para este hombre y su mascota


Niña posando para papá,  quien  le ha ayudado a ser "arquitecta de playa"


 
Las olas a veces permiten un baño en este mar bravío y se transforma en piscina natural

Adultos, niños y perros conviven en este entorno de fuerza y tiempo cambiante


El el camión portando el cubo, juguetes  olvidados sobre la arena 


El regreso de la pesca de dos deportistas que son parte de
 de los protagonistas de estas desérticas playas landesas.